Flujo después del parto con un olor desagradable

 

Toda mujer en el período de posparto (ya sea por parto vaginal o cesárea) se enfrenta a un flujo vaginal que dura aproximadamente de 6 a 8 semanas. Durante este período, la secreción puede cambiar de color, densidad y olor, ya que consiste en células sanguíneas, plasma y epitelio uterino moribundo. Sin embargo, a veces el flujo tiene un olor desagradable, lo que puede indicar un grave peligro para la salud de la mujer.

¿Qué se considera flujo normal?

Entonces, en el transcurso de 6 a 8 semanas, cuando el cuerpo femenino se recupera después del parto, vuelve a sus parámetros “iniciales”: los huesos pélvicos se reemplazan, la configuración de la columna cambia, las paredes de la vagina se estrechan y en al mismo tiempo, la piel y los músculos abdominales se tensan.

Pero cambios especialmente importantes en este momento ocurren en el útero, que comienzan inmediatamente después de la separación de la placenta de su superficie interna (independientemente de cómo nació el niño, por cesárea o por el canal de parto natural). El útero comienza a encogerse, encogerse a su estado normal. La separación de la placenta se acompaña de una especie de lesión en la superficie interna del útero, por lo que durante 2-3 días se acompaña de un sangrado bastante fuerte, llamado loquio.

Con el tiempo, los loquios que no tienen un olor pronunciado o que huelen como el flujo menstrual normal cambian de intensidad, consistencia y color, y se debe prestar atención a esto (incluso si la descarga no es particularmente molesta). En el día 6-7 después del parto, los loquios se vuelven menos abundantes y adquieren un tinte marrón, sin embargo, pueden volverse un poco más intensos si la mujer está amamantando, tiene actividad física. También pueden aumentar con la tos o la risa, pero esto es una manifestación normal de una contracción más activa de los músculos de la cavidad abdominal y con ellos del útero.

En general, se acepta que el flujo es normal si no va acompañado de sensaciones desagradables como irritación, picazón, no tiene un olor desagradable y ha cesado por completo a los 45-60 días después del nacimiento.

Tan pronto como el flujo haya cesado (antes o después de las fechas indicadas), se recomienda a las mujeres someterse a un examen ginecológico para que el médico pueda evaluar el estado del útero, su cuello uterino, la vagina y las suturas.

Olor desagradable de flujo después del parto: ¿qué puede causarlo?

Si aparece un olor desagradable, debe consultar inmediatamente a un médico, ya que esto puede indicar un proceso inflamatorio o la aparición de ciertas enfermedades:

  1. En los primeros días después del parto, los loquios son los más abundantes. Tienen un olor característico a sangre y un color rojo brillante. Alrededor del décimo día, la secreción disminuye notablemente, su color se vuelve amarillento o blanco, pero puede haber un olor a preli, que no se nota demasiado si se observa una higiene adecuada. Tales descargas se consideran normales.
  2. Un olor agrio o a pescado puede aparecer cuando hay una secreción abundante de color blanco o gris, lo que generalmente indica una violación de la microflora de la vagina causada por medicamentos o intervención física. Muy a menudo, este tipo de secreción puede indicar vaginosis bacteriana, especialmente si se aplicaron suturas después del parto y se realizó un tratamiento con antibióticos. Puede obtener dicho diagnóstico en caso de violación de la higiene personal. Un olor agrio de secreción blanca cuajada y picazón pueden ser síntomas de aftas. Esta enfermedad ocurre en el contexto de una disminución de la inmunidad, lo que conduce a un cambio en la composición de la flora vaginal y al crecimiento activo del hongo Candida. A diferencia de la vaginosis, la candidiasis requiere el tratamiento de ambas parejas sexuales para evitar la recurrencia (reinfección) de la enfermedad, incluso si ocurre por sí sola.
  3. Puede aparecer un fuerte olor a podredumbre y loquios con una mezcla de pus después del parto, que no tuvo lugar en las condiciones estériles de la sala de partos del hospital, sino en el hogar o en condiciones de emergencia (por ejemplo, el parto comenzó en el transporte – tren, avión, etc.) – cuando hay una alta probabilidad de herida de nacimiento para infectar. Dependiendo de la ubicación de la infección (puede ser la vagina, el cuello uterino, la cavidad uterina, la cavidad abdominal periuterina), pueden ocurrir una serie de enfermedades que tienen una forma aguda o crónica:
  • endometritis;
  • parametritis;
  • colitis puerperal;
  • úlcera puerperal;
  • peritonitis posparto.

La forma aguda de la enfermedad se caracteriza por el rápido desarrollo del proceso inflamatorio en el órgano afectado, fiebre, acompañado de dolor agudo y acumulación de pus (puede salir junto con el flujo vaginal y darles un fuerte olor pútrido).

La forma crónica se caracteriza por dolores de tirones, un ligero aumento de la temperatura corporal (a veces puede permanecer sin cambios) durante mucho tiempo y una violación del ciclo.

¿Cuáles podrían ser las consecuencias?

Cada una de las enfermedades que se han presentado, cuyo síntoma es un desagradable olor a flujo vaginal en el puerperio, puede tener consecuencias que distan mucho de ser simples “molestias” estéticas. Por ejemplo:

  1. Vaginosis (rara vez se encuentra sin enfermedades concomitantes, lo que en última instancia conduce a procesos inflamatorios en el útero, las trompas y los ovarios): irrita la membrana mucosa y hace que el sistema genitourinario sea vulnerable a diversas infecciones. Todo esto puede causar posteriormente infertilidad o afectar el porte de los embarazos, tener complicaciones en el parto.
  2. El sangrado uterino es quizás la complicación más peligrosa que ocurre en los primeros 3 a 7 días después del parto, e incluso un pequeño remanente de tejido placentario en la cavidad uterina adherido a su endometrio (la capa de revestimiento del órgano) puede provocarlo.
  3. La endometritis es una enfermedad causada por microorganismos patógenos que han ingresado al útero desde la vagina. La inflamación del endometrio puede ser causada, como en el caso anterior, por restos de placenta, así como por coágulos de sangre que se han acumulado en la cavidad uterina y son un ambiente propicio para la reproducción de la flora patógena. Una de las razones de la entrada de bacterias patógenas desde la vagina a la cavidad uterina puede ser el incumplimiento de las normas de higiene personal y/o el inicio demasiado temprano de las relaciones sexuales. La endometritis puede conducir a la infertilidad y, si se descuida la enfermedad, a la muerte.
  4. El sangrado abundante también puede ocurrir con sangrado hipotónico , como resultado de una contracción insuficiente del útero debido a un debilitamiento significativo de sus fibras musculares.
  5. Los procesos inflamatorios de las heridas posparto de la vagina, el cuello uterino o en su cavidad pueden ser mucho peores : al extenderse profundamente en el cuerpo, la infección afecta primero a los órganos del sistema genitourinario y luego a todo el cuerpo, lo que provoca sepsis (puede desarrollar casi instantáneamente – en 1-2 días – desde su etapa leve hasta el shock séptico con un desenlace fatal).

¿Qué hacer?

En primer lugar, debes recordar que:

  1. La automedicación siempre es peligrosa, y en el puerperio es mortal, ya que incluso un ligero malestar puede ser síntoma de una complicación posparto grave.
  2. La higiene personal es especialmente importante en el período posparto; esto reducirá el riesgo de diversas complicaciones.
  3. En los primeros 3-4 meses, una mujer debe evitar:
  • visitar el baño, y en particular la sala de vapor;
  • bañarse en un baño (en lugar de un baño, use una ducha) o en depósitos cerrados;
  • Actividad física excesiva y deportes intensos.

Recomendado durante este período:

  • lavar (¡pero no ducharse!) usando decocciones de hierbas (por ejemplo, manzanilla, sucesión, ortiga),
  • el uso de condones durante la reanudación de la actividad sexual: esto no solo evitará un embarazo no deseado, sino que también protegerá contra la penetración de bacterias “extrañas” en la cavidad uterina, lo que puede causar cambios destructivos;
  • apego frecuente del bebé al pecho durante la lactancia: esto simula la contracción del útero y su “limpieza”;
  • vaciado regular de la vejiga;
  • dormir o descansar en una posición prona ayuda a contraer los músculos abdominales.

No debe posponer una visita al médico si:

  1. La descarga terminó antes de un mes después del nacimiento; esto puede ser el resultado de la acumulación de coágulos de sangre en el útero, lo que provocará procesos inflamatorios en sus tejidos.
  2. La secreción sanguinolenta no disminuye; esto puede provocar anemia.
  3. Los loquios tienen un olor desagradable, aparecen periódicamente dolores tirando en la parte inferior del abdomen, fiebre: esto puede ser un signo de la aparición de una de las complicaciones del período posparto.

Al contactar a un médico acerca de una secreción con un olor desagradable, es posible que una mujer deba: someterse a un examen ginecológico y responder las preguntas del ginecólogo (es mejor si es el mismo médico que realizó el embarazo) sobre el curso del parto, complicaciones durante el parto (se puede requerir una tarjeta de control de embarazo y parto);

  • pasar un frotis para flora, un frotis por el método PCR;
  • hacerse análisis de sangre y orina, pruebas de ETS;
  • someterse a una ecografía.

Por muy ocupada que estés con el bebé, la aparición de flujo con olor desagradable en el puerperio requiere una consulta urgente con un especialista, pues en algunos casos puede tratarse no solo de una enfermedad grave, sino también de la vida misma.

¡Estar sano!

Breve resumen

¿Qué se considera flujo normal? Entonces, en el transcurso de 6 a 8 semanas, cuando el cuerpo femenino se recupera después del parto, vuelve a sus parámetros “iniciales”: los huesos pélvicos se reemplazan, la configuración de la columna cambia, las paredes de la vagina se estrechan y en al mismo tiempo, la piel y los músculos abdominales se tensan.
Olor desagradable de flujo después del parto: ¿qué puede causarlo? Si aparece un olor desagradable, debe consultar inmediatamente a un médico, ya que esto puede indicar un proceso inflamatorio o la aparición de ciertas enfermedades:
¿Cuáles podrían ser las consecuencias? Cada una de las enfermedades que se han presentado, cuyo síntoma es un desagradable olor a flujo vaginal en el puerperio, puede tener consecuencias que distan mucho de ser simples “molestias” estéticas.
¿Qué hacer? En primer lugar, debes recordar que: