¿Es posible hacer un enema durante el embarazo?

Uno de los problemas más comunes y delicados de las mujeres embarazadas es el estreñimiento. Por regla general, es causada por causas fisiológicas naturales y los ginecólogos saben cómo superar esta dolencia. Muchas mujeres en trabajo de parto cometen un grave error: no informan el problema al médico y tratan de solucionarlo ellas mismas. Los enemas generalmente se usan primero. ¿Por qué y cómo se usan, en qué casos están justificados y qué soluciones de enema son las más efectivas y seguras?

Indicaciones para el uso

Un enema es la introducción de una pequeña cantidad de agua o una solución especial en el recto para ablandar las heces y completar el acto de la defecación. Las indicaciones para el uso de este método son el estreñimiento, que se puede diagnosticar si las deposiciones ocurren menos de tres veces por semana, así como la helmintiasis (infección por oxiuros). A este respecto, se distinguen los enemas de limpieza (para el estreñimiento) y terapéuticos (para la helmintiasis).

Durante el embarazo, el estreñimiento es común: un útero agrandado presiona los intestinos, lo que dificulta el paso de las heces al ano. Dado que las futuras madres se quejan sistemáticamente de esta condición, los médicos han podido usar su experiencia y desarrollar otras formas más suaves y menos traumáticas para limpiar los intestinos. Por lo tanto, los ovulos rectales con efecto laxante son famosos por su acción suave y, a veces, resultan suficientes para ajustar la dieta y revisar el régimen de bebida.

Hacer un enema durante el embarazo solo es posible con el permiso de un médico. Para que el médico permita el procedimiento, se deben diagnosticar las dificultades sistemáticas con el acto de defecar (estreñimiento) y la ineficacia de otros métodos para tratarlas.

Tanto el propio estreñimiento como el uso frecuente de enemas para ablandar las heces pueden acarrear consecuencias desagradables, por lo que no se debe recurrir a esta medida más de dos veces por semana.

¿Es posible hacer un enema durante el embarazo?

– en una etapa temprana

Un enema es una forma efectiva y rápida de decir adiós a las heces estancadas en los intestinos, pero este procedimiento durante el embarazo se considera indeseable. Esto se debe a la ubicación de los intestinos muy cerca del principal órgano reproductivo: el útero, por lo que un efecto sistemático en los intestinos puede provocar el tono uterino.

El tono del útero es peligroso aborto involuntario y parto prematuro. Sin embargo, curiosamente, las fechas iniciales en este sentido son las más seguras. Pero aquí también hay una paradoja: en el primer trimestre, el útero no interfiere de ninguna manera con el acto de defecar, por lo que el estreñimiento es raro.

Si aparecieron problemas con las deposiciones en las primeras etapas, debe informar al médico al respecto. Lo más probable es que el ginecólogo aconseje supositorios rectales o dé recomendaciones sobre la introducción de fibra vegetal en la dieta. Si el problema no se resuelve de esta manera, se prescribirán enemas, siempre que el embarazo se desarrolle sin complicaciones, no haya amenaza de aborto espontáneo, a la futura madre no le moleste el dolor abdominal y no haya manchado.

Las indicaciones para el enema en el primer trimestre son el estreñimiento y la infección por oxiuros.

– en una fecha posterior

Relativamente inseguros para el procedimiento de lavado intestinal son el segundo y el tercer trimestre, el momento en que el tono del útero es más probable. En casa, no se dan enemas, ya que puede comenzar un parto prematuro.

Nuevamente, si los supositorios y la corrección nutricional no ayudan, los médicos recetan enemas, que se realizan solo en un entorno hospitalario. A veces un microclyster es suficiente.

En el segundo trimestre, los enemas no pueden administrarse más de una vez por semana. En el tercer trimestre, es aceptable el uso de microclysters después de la semana 36.

En la víspera del parto, a veces se administra un enema para limpiar los intestinos antes del parto, para que esto no suceda durante los intentos.

Preparación de una solución de enema

– solución de soda

Para preparar una solución de soda, necesitarás medio litro de agua a temperatura ambiente y 1 cucharadita de bicarbonato de sodio. El bicarbonato de sodio debe disolverse en el agua, por lo que la solución se calienta a 50 grados centígrados y luego se enfría a una temperatura agradable. Durante el procedimiento en sí, la temperatura de la solución debe ser de al menos 23 grados.

Esta solución es efectiva no solo para el estreñimiento, sino también para la helmintiasis. También elimina toxinas y mejora el proceso de digestión.

– enema con ajo

El enema de ajo no se recomienda para enfermedades de los órganos intestinales, incluida la irritación y la inflamación (colitis, enteritis). La composición de la solución solo agravará la irritación de la mucosa del órgano. La mezcla de ajo también puede aumentar la presión arterial, por lo que debes tener especial cuidado con ella.

La principal indicación para el enema de ajo es la helmintiasis.

Para obtener una solución, muela unos dientes de ajo, vierta un litro de agua caliente y deje en infusión. Antes de usar, la solución debe filtrarse, la temperatura también debe ser de unos 23 grados.

Hay otras variedades de enemas de ajo. A veces, las gachas de ajo se vierten con agua hervida a temperatura ambiente y se infunden durante 12 horas, se cierran herméticamente con una tapa y se envuelven en una manta o toalla.

Además, para aumentar la eficiencia, puede agregar 3 cucharadas de tanaceto seco a la solución, mezclar bien y colar.

– enema de agua

El enema más fácil de preparar y seguro es el agua. Su propósito es limpiar los intestinos con estreñimiento.

Para una solución acuosa, se toma agua hervida a temperatura ambiente. Puede agregar una cucharada de vaselina o aceite de ricino a la solución.

Otros componentes para enemas, por ejemplo, una decocción de manzanilla, tanaceto y ajenjo, pueden ser recetados por receta médica.

Autoadministración de un enema

Es posible ponerse un enema por su cuenta solo con el permiso de un médico y preferiblemente con la ayuda de alguien. Puede ser inconveniente para una mujer embarazada, especialmente en las últimas etapas, cuando el estómago ya ha alcanzado un gran tamaño, realizar el procedimiento sin ayuda, especialmente por primera vez.

Antes de comenzar a limpiar los intestinos, debe preparar un hule, un pañal o una sábana, vaselina o lubricante, un recipiente, lavarse bien las manos con agua y jabón.

El algoritmo para la autoadministración de un enema es el siguiente:

  • Prepare la solución elegida o recomendada por el médico, llévela a una temperatura aceptable (23 grados), llénela con un enema.
  • Proporcione un lugar cómodo cerca del inodoro, coloque una sábana limpia o un hule.
  • Tome una posición cómoda, acuéstese sobre su lado izquierdo, doble las rodillas. A algunas mujeres les resulta más cómodo hacer esto a cuatro patas.
  • Lubrique la punta de la manguera del enema con vaselina o lubricante.
  • Lentamente y con mucho cuidado, para no dañar la membrana mucosa del colon, la punta se inserta en el ano.
  • Después de un minuto, debe comenzar gradualmente a introducir agua en los intestinos. Tienes que hacer esto lentamente, en pequeñas porciones. En este caso, la respiración debe ser uniforme y profunda.
  • Si se presentan molestias en el abdomen, se recomienda realizar movimientos circulares con la mano libre en el sentido de las agujas del reloj.
  • Una vez que el enema está vacío, la punta se retira con cuidado. No debe levantarse de inmediato: es mejor permanecer en la posición aceptada por un tiempo hasta que aparezca el impulso.

Si a una mujer embarazada le resulta inconveniente ponerse de pie a cuatro patas o acostarse de lado debido a su gran barriga, debe darse la vuelta y ponerse boca arriba, enderezando un pañal o una sábana debajo de ella. Por lo general, después de 5-15 minutos se logra el efecto deseado.

Características y precauciones

Las características del procedimiento durante el embarazo provocan una serie de precauciones que no se pueden descuidar.

Primero, no se preocupe y preocúpese por la delicadeza del problema y sienta vergüenza de decírselo al médico. La autoadministración de un enema puede dar lugar a complicaciones imprevistas. Por lo tanto, con el estreñimiento regular, debe acudir a la clínica prenatal, informar al ginecólogo sobre el problema y solicitar una solución.

En segundo lugar, si es difícil para una mujer administrarse un enema ella misma, no dude en pedir ayuda a sus familiares: esposo, parientes, amigos cercanos. Entienden la complejidad de la situación y en ningún caso se reirán.

Si el enema fue efectivo, no abuse de este procedimiento. Dependiendo de la duración y el estado de salud, la frecuencia de aplicación permitida de este método varía de 1 a 2 veces por semana.

Antes de permitir un enema, el médico prescribirá un examen. En primer lugar, necesitarás una ecografía no programada para valorar el tono del útero.

Las contraindicaciones para la limpieza intestinal son:

  • Un historial de abortos espontáneos o una amenaza existente de interrupción del embarazo;
  • Hipertensión del útero;
  • Dolor abdominal y manchado;
  • hipertensión estable;
  • Hemorroides;
  • hipertermia;
  • Hernia;
  • enfermedades del sistema cardiovascular;
  • El prolapso de las paredes de la vagina;
  • enfermedad gastrointestinal;
  • Náuseas;
  • insuficiencia ístmico-cervical;
  • Baja placentación;
  • insuficiencia renal;
  • Sangrado del ano, tumores del recto.

Si no hay contraindicaciones, pero otros métodos no ayudan a superar el estreñimiento, se prescribe un enema. El volumen permitido durante el embarazo no es más de medio litro.

Prevención del estreñimiento en el embarazo

Las medidas preventivas no pueden garantizar una protección del 100% contra el estancamiento de las heces, pero aún es posible lograr un estado en el que los ovulos rectales, la corrección de la nutrición o los microclysters sean efectivos y no haya necesidad de un enema.

En primer lugar, estamos hablando de planificar un embarazo. Si una mujer va deliberadamente a concebir un hijo y se acerca responsablemente a esta etapa crucial, se le asignará un examen durante el cual se pueden identificar los factores de riesgo de estreñimiento (por ejemplo, colitis, enteritis). La corrección del estado de salud es el camino principal para un embarazo fácil.

Las recomendaciones para una nutrición adecuada durante el embarazo también se dan por una razón. Algunos alimentos, especialmente las verduras y frutas, normalizan la digestión y previenen el estreñimiento. La avena y el trigo sarraceno, las frutas secas, las hierbas y los productos de leche agria también tienen un efecto positivo en el estado del tracto gastrointestinal.

A menudo, las mujeres embarazadas experimentan hinchazón y se ven obligadas a limitarse a la ingesta de líquidos. Si la elección está entre estos dos problemas, es mejor optar por el menor de dos males: beber más agua, decocciones de hierbas, compotas de frutos secos, bebidas y zumos de frutas naturales. El té con hinojo, una decocción de ciruelas pasas, albaricoques secos, jugo de remolacha y manzanas son útiles para la digestión.

La actividad física reduce el riesgo de estreñimiento durante el embarazo. Por supuesto, muchos deportes están absolutamente contraindicados para las mujeres “en posición”, pero se beneficiarán las caminatas al aire libre, la gimnasia y el yoga para mujeres embarazadas, los aeróbicos acuáticos, los tipos especiales de fitness y el baile.

¿Es posible poner un microclyster antes del parto?

La administración de un microclyster o enema puede estar indicada por un médico: en algunas maternidades, la limpieza intestinal es obligatoria. Asimismo, la iniciativa puede provenir de la gestante, que se avergüenza de afrontar el proceso de defecación durante el proceso del parto. En el segundo caso, el deseo de la mujer se tiene en cuenta sin falta: el miedo psicológico y la incomodidad pueden conducir a una actividad laboral débil y falta de voluntad para empujar.

Si ha llegado el término del parto, el médico no interferirá con la configuración de los microclysters. El procedimiento no solo previene la excreción involuntaria de heces, sino que también aumenta las contracciones, lo que resulta en un parto más rápido.

Los microclysters son más convenientes de usar, por lo que los médicos recomiendan recurrir a este procedimiento poco antes del parto.

De todos modos, una mujer embarazada no se siente bien: pesadez en las piernas, dolor en la parte inferior de la espalda y el abdomen, toxicosis, hinchazón, venas varicosas y estancamiento de las heces. Los médicos no se sorprenden cuando las futuras madres acuden a una cita con quejas de estreñimiento y realizan un examen para saber si un enema es aceptable en cada caso.

Ante la primera queja, el especialista recomienda reconsiderar la dieta, puede prescribir óvulos laxantes rectales o microclysters, pero si el problema no se soluciona, se permite un enema. Se recomienda realizar el procedimiento no más de 1-2 veces por semana utilizando soluciones especiales. Al mismo tiempo, asegúrese de controlar su bienestar y no tenga miedo de pedir ayuda a sus seres queridos.

Breve resumen

Indicaciones para el uso Un enema es la introducción de una pequeña cantidad de agua o una solución especial en el recto para ablandar las heces y completar el acto de la defecación.
¿Es posible hacer un enema durante el embarazo? – en las primeras etapas, el enema es una forma efectiva y rápida de decir adiós a las heces estancadas en los intestinos, pero este procedimiento durante el embarazo se considera indeseable.
Preparación de una solución de enema – solución de soda Para preparar una solución de soda, necesitará medio litro de agua a temperatura ambiente y 1 cucharadita de bicarbonato de sodio.
– solución de soda Para preparar una solución de soda, necesitarás medio litro de agua a temperatura ambiente y 1 cucharadita de bicarbonato de sodio.
Autoadministración de un enema Es posible ponerse un enema por su cuenta solo con el permiso de un médico y preferiblemente con la ayuda de alguien.
Características y precauciones Las características del procedimiento durante el embarazo provocan una serie de precauciones que no se pueden descuidar.
Prevención del estreñimiento en el embarazo Las medidas preventivas no pueden garantizar una protección del 100% contra el estancamiento de las heces, pero aún es posible lograr un estado en el que los óvulos rectales, la corrección de la nutrición o los microclysters sean efectivos y no haya necesidad de un enema.
¿Es posible poner un microclyster antes del parto? La administración de un microclyster o enema puede estar indicada por un médico: en algunas maternidades, la limpieza intestinal es obligatoria.